Redacción
China. – Tras un fuerte brote de contagios de Covid-19, la saturación de servicios sanitarios y el aumento de la letalidad en China, en estos últimos días, pusieron en alerta a las autoridades sanitarias internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), pues las nuevas infecciones son causadas por una nueva versión del SARS-CoV2, la BF.7.
Esta variante del Covid-19 se deriva de ómicron, es decir, es uno de los sublinajes actuales, el cual se caracteriza por poseer una alta capacidad de escape a la inmunidad inducida por las vacunas contra el coronavirus. Además, la variante BF.7, se triplica en cuanto a propagación, mayor a ómicron.
Sin embargo, actualmente no se ha probado que esta secuencia genética del SARS-CoV2 sea culpable del aumento de muertes en China y algunos países asiáticos. El incremento de fallecidos se trataría del bajo porcentaje de vacunación en la población adulta y el fin de su política “cero Covid”.
La mayoría de los habitantes del país carecen de inmunidad frente al virus porque la estrategia del gobierno estuvo centrada en la prevención, vigilancia de casos y estrictas cuarentenas, es decir, los contagios masivos, por primera vez, han causado dicha situación crítica en materia de salud.
Cabe destacar que los síntomas no tienen grandes diferencias con aquellos presentados mediante la infección, con otras variantes de Covid-19, y los principales son; dolor muscular, cansancio, dolor de cabeza, fiebre, congestión y escurrimiento nasal, cuerpo cortado.