Redacción
México.- A 17 meses de su extradición a México, la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó a un juez federal condenar a 39 años de prisión a Emilio Lozoya, en el proceso que le iniciaron por los sobornos que presuntamente recibió de la constructora brasileña Odebrecht.
En un escrito entregado al juez de control Artemio Zúñiga Mendoza, del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, la Fiscalía presentó su primera acusación contra el ex director de Pemex y pide imponerle 15 años de prisión por el delito de lavado de dinero, 14 años por cohecho y otros 10 por asociación delictuosa.
Tres altos mandos de Odebrecht declararon ante la FGR que Emilio Lozoya recibió sobornos por 6 millones de dólares a cambio de que Pemex asignara contratos a la compañía brasileña en la refinería de Tula, Hidalgo.
Se trata de los dichos de Luis Alberto de Meneses Weyll, ex director de Odebrecht México, así como Luiz Mameri e Hilberto da Silva, ex ejecutivos de la misma compañía, quienes son protegidos de justicia brasileña.
Estos testimonios forman parte de la primera acusación de la FGR contra Lozoya por el caso Odebrecht.
La Fiscalía también demanda castigar al ex director de Pemex con el pago de 5 mil 450 días de multa, la suma de los montos máximos contemplados en los tres delitos.
Al mismo tiempo, solicita decomisarle la mansión del condominio Quinta Mar de Ixtapa, Zihuatanejo, que tiene una extensión de 3 mil 578 metros cuadrados, adquirida en 2013 por Marielle Helene Eckes, esposa de Lozoya, por 1.9 millones de dólares.
De acuerdo con los informes judiciales, la FGR también pide que el procesado repare un daño que en audiencias pasadas fue señalado en 7 millones 385 mil dólares.
En noviembre pasado, la Fiscalía reclamó esta suma como condición para negociar un posible criterio de oportunidad, beneficio que lo convertiría en testigo colaborador y cancelaría el proceso.
En esta causa penal se acusa a Lozoya de haber recibido sobornos por 6 millones de dólares de Odebrecht y lavar un millón 385 mil dólares en el sistema financiero.
Si bien en un principio las investigaciones señalaban posibles sobornos que iban de 10.5 millones a 12 millones 856 mil 433 dólares, al final la Fiscalía acusó sólo los depósitos que podían ser sancionados y no estaban prescritos legalmente.
Además de los testimonios de los mandos de Odebrecht, la FGR tiene como pruebas documentos financieros entregados por autoridades de Brasil, Estados Unidos, Suiza, Alemania y Liechtenstein, dictámenes contables e informes policiacos.
El juez notificará esta acusación en un plazo de tres días a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y Pemex; después, tendrá 10 días para notificar a la defensa.
El siguiente paso será convocar a una audiencia intermedia en la que serán depuradas las pruebas, es decir, en donde se debatirá la legalidad y pertinencia de cada una de ellas para considerarlas en un eventual juicio.
En los próximos días, la FGR también presentará su segunda acusación contra Lozoya por el caso Agronitrogenados, causa penal en la que le atribuyen cobrar un soborno de 3.4 millones de dólares para que Pemex comprara a sobreprecio a Altos Hornos de México (AHMSA) la planta “chatarra” del complejo Pajaritos, en Veracruz.
Lozoya está preso en el Reclusorio Norte desde el 3 de noviembre pasado debido a que el juez Zúñiga Mendoza consideró que el ex funcionario cuenta con las redes familiares y los recursos económicos suficientes para huir.