Redacción
Guanajuato.– En Celaya, la familia de Ana Karen Almaraz García buscó durante cuatro años a su hija por todas partes; un grupo armado se la llevó de su fiesta de cumpleaños.
Fue hasta el 21 de junio que la Fiscalía General del Estado (FGE) de Guanajuato informó a su mamá que localizaron a su hija Ana Karen, pero sin vida. Su cuerpo pasó del Semefo a la fosa común, estuvo ahí durante casi cuatro años. Su madre contó que al día siguiente de su desaparición fue a presentar la denuncia al ministerio público, pero fue maltratada por los agentes ministeriales.
Contó que pidió que se le hicieran pruebas de ADN desde el principio, pero en el Ministerio Público me dijeron que no tenía derecho a nada, que por eso habían pedido una foto de ella, para hacer una ficha. La buscadora contó que ahora que entró al colectivo Proyecto de Búsqueda inició de nuevo con la revisión de su carpeta y expediente, y ahora si me mandaron a hacer las pruebas de ADN.
Incluso, expone que mientras a ella le dicen que se la encontraron en mayo, en los papeles dice que fue en febrero y que según la sepultaron en diciembre, pero en los papeles dice que fue en noviembre. Añadió que cuando ya le iban a dar el cuerpo de su hija, resulta que la Fiscalía se equivocó y abrió en otro lugar. Y no hicieron caso, hasta que vieron y les dile la ubicación, y yo se la estoy dando, y no se vale que no me hagan caso”.
Fue hasta el 21 de junio de este año que pudo tener los restos de su hija. Recordó que el 17 noviembre de 2017 desapareció su hija afuera de su casa. A punta de pistola se la llevaron unos hombres armados, enfrente de nosotros. Por último, refirió que al final supo que su hija murió de un balazo en el cráneo.