Redacción
Brasil.- Luego que se reportara que encontraron a un indigente teniendo intimidad con una mujer en un auto en Brasil, y que éste recibiera una golpiza por parte del esposo, el vagabundo contó su versión de los hechos y aseveró que no se trató de una violación como acusó la pareja.
De acuerdo con la declaración que dio ante la comisaría de Brasilia, el vagabundo, de quien no revelaron su identidad, contó que el pasado martes, alrededor de las 21:30, un automóvil se detuvo cerca de la escuela parroquial de Planaltina, y precisó que al interior estaba la mujer quien lo llamó y le pidió que se acercara al vehículo.
El indigente añadió que ella le habría dicho “¿Jugamos?“, y fue en ese instante que la mujer lo convenció de subirse al coche. Fue así que ambos comenzaron a tener relaciones sexuales y enfatizó que no se trató de una violación como acusaron inicialmente.
Declaró además que mientras estaba desnudo y teniendo relaciones con la conductora dentro del vehículo, un hombre “enojado” ingresó al automóvil y fue que desató la pelea. Asimismo, aseguró que no conocía a la mujer. Esta última declaración no coincidiría con lo visto en las redes sociales de la mujer, pues ahí se muestra que ambos ya se conocían debido a que tenían diversas fotos juntos en donde ella lo ayudaba.
Según Eduardo Alves, esposo de la mujer, su pareja estaba sufriendo un brote psicótico, por lo que no podría consentir una relación sexual, de igual manera, indicó que ella solo quería ayudar a personas vulnerables a través de la iglesia en la que predicaba.
La versión de la pareja sostiene que la mujer recibió un mensaje de Dios y al ver al vagabundo, vio “imágenes de su esposo” y el creador, por lo tras acercarse al indigente, éste le pidió un abrazo, después subieron al auto, empezó a acariciarle y se dirigieron a otro punto donde mantuvieron la relación, para finalmente ser descubiertos por el esposo quien le propinó una golpiza.
De momento, no hay ninguna persona detenida, ni siquiera Eduardo Alves por golpear al indigente, de igual manera, el ministerio mantiene el caso confidencial y prefirió no dar más detalles hasta que esclarezcan si hubo o no violencia sexual en el contexto.