Redacción
Guanajuato.- El pasado 24 de junio, madres de familia denunciaron en el Ministerio Público de Guanajuato que, al menos, seis niñas fueron víctimas de abuso sexual en las aulas del colegio preescolar “José Joaquín Fernández de Lizardi”, ubicado en la comunidad Camino Real, en Silao.
Según informó Proceso, el agresor, identificado como Ernesto ‘N’, trabajaba como becario en la institución y tenía a su cardo a un grupo de 15 niñas y niños. Los abusos cometidos a por lo menos seis de sus alumnas habrían ocurrido dentro de un salón de clases, cuyas ventanas mantenía cubiertas con cartón, además de tener las cortinas cerradas, con la excusa de ponerle películas a sus estudiantes.
La Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG) informó tres días después que había iniciado el Protocolo para la Detección, Prevención y Actuación en caso de Violencia Escolar. Sin embargo, el mismo 24 de junio Ernesto ‘N’ presentó su renuncia, lo cual imposibilitó a la SEG de actuar en su contra.
De esta forma, el procedimiento disciplinario laboral iniciado por la SEG tiene el objetivo de determinar la responsabilidad y sanciones correspondientes tanto de la Orientadora Educativa como de la Coordinadora del Preescolar Alternativo, cuyo nombre es Brenda Blancarte, identificada como pareja sentimental de Ernesto ‘N’.
Sumado a ello, ofrecieron apoyo legal y psicológico tanto para las madres de familia como para las víctimas de los múltiples abusos.