Redacción
Silao.- Con el pretexto de que proyectaba películas a los alumnos, el ‘profe Ernesto’ tapaba las ventanas del salón. Así, quien ingresó al preescolar “José Joaquín Fernández de Lizardi” como becario abusó sexualmente de seis niñas en Silao.
El kínder se encuentra en la comunidad Camino Real, un poblado con apenas 280 habitantes. La escuela también es pequeña: sólo tiene un salón de aproximadamente 25 metros cuadrados y un total de 18 alumnos.
Es un plantel multigrado, es decir, de primero a tercero de preescolar aprendían en la misma aula. La edad para este nivel educativo va de los 3 a los 6 años.
De acuerdo con madres de familia, el acusado de realizar tocamientos a las niñas ingresó al plantel el 1 de marzo de este año. Los alumnos consideraban divertido al maestro porque llenaba las clases de películas y juegos.
Al saber esto, dijeron, algunas mamás fueron a preguntar por la calidad de las clases y vieron que los contenidos de lo proyectado eran educativos.
Fue hasta que una niña de 5 años rompió en llanto y le contó a su mamá que su profesor la tocaba y la amenazaba con decir algo.
Al preguntar familiares a las alumnas, se descubrió que otras cinco también fueron abusadas.
El 24 de junio, las madres acudieron al Ministerio Público de Silao a levantar la denuncia en contra del maestro, cuyos servicios eran cubiertos con una beca.
También acusaron que las encargadas del plantel hicieron caso omiso de sus quejas.
De acuerdo con fuentes educativas del estado, en comunidades apartadas a nivel preescolar es común que a los estudiantes de licenciatura que se preparan para docentes se les permita enseñar frente a grupo. El criterio de la aceptación recae en la orientadora o coordinadora de este preescolar alternativo.
Ese día, Ernesto ‘N’ habría renunciado al puesto, ya que, de acuerdo con información oficial, desde el 24 de junio el presunto agresor no guarda relación laboral alguna con la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG).
Esta dependencia informó que el 27 de junio, día que tuvo conocimiento del hecho por la vía oficial, inició una investigación en contra del becario, a quien también se le había conferido la responsabilidad de encargado de este kínder.
La coordinadora y orientadora están suspendidas en lo que se sigue el proceso de investigación y disciplinario laboral para determinar la responsabilidad y sanciones.
La SEG afirmó que comenzó con el Protocolo para la Detección, Prevención y Actuación en caso de Violencia Escolar, con la que se ofreció apoyo legal y psicológico a las madres de familia y a las víctimas.
Mientras, las autoridades judiciales también realizan indagatorias para perseguir el delito denunciado. Desde el 4 de julio, se asignó una nueva becaria a este preescolar a fin de seguir con las actividades.