Redacción
Rusia.- Ucrania y Rusia no lograron acordar un alto el fuego en las conversaciones que terminaron este martes en Estambul. Sin embargo, Moscú reducirá las operaciones militares en áreas donde sus fuerzas están perdiendo terreno mientras Kiev pidió garantías de seguridad a los miembros de la Unión Europea y la OTAN.
Un negociador ucraniano dijo que su país está buscando garantías territoriales que no incluya las áreas controladas por Rusia y que Kiev está dispuesta a discutir el estatus de la Crimea ocupada. Rusia indicó que era posible una reunión entre el presidente Vladimir Putin y su homólogo ucraniano Volodímir Zelenski
La delegación de Rusia salió de Estambul y no se fijó fecha ni hora para posibles conversaciones futuras, según una persona cercana a la delegación de Moscú.
Las naciones europeas expulsaron a más diplomáticos rusos de sus capitales, incluso cuando las acciones subieron y el petróleo cayó por el optimismo por el progreso en las negociaciones.
Sanciones contra Putin se siguen acumulando
Países Bajos anunció la expulsión de 17 oficiales de inteligencia rusos y Bélgica dijo que expulsaría a 21 por espionaje. Macedonia del Norte también declaró a cinco diplomáticos personas no gratas por violar convenciones diplomáticas. La República Checa, que expulsó a decenas de rusos de la embajada en Praga el año pasado, apuntó este martes que le estaba diciendo a uno más que abandone el país.
Desde la invasión del mes pasado, los miembros de la Unión Europea han expulsado a diplomáticos rusos, incluidas las tres naciones bálticas, que expulsaron a 10 personas; Bulgaria, que expulsó a 10 más; y Polonia, que ordenó la salida de 45.
La policía de Eslovaquia expulsó a tres diplomáticos rusos después de que detuviera a cuatro personas sospechosas de espiar para Moscú. Alemania también está considerando expulsar a los presuntos espías, adelantó un funcionario este martes.
A estos anuncios se suma el de Polonia, que adelantó que planea prohibir las compras de carbón desde Rusia y, en cambio, buscar suministros de países como Australia, Colombia y Estados Unidos, explicó la ministra de Medio Ambiente, Anna Moskwa.
El país, que ha estado importando alrededor de 8 millones de toneladas de carbón ruso al año, ha pedido a la Unión Europea que prohíba las exportaciones de energía de Rusia en respuesta a su invasión de Ucrania.