Redacción
México.- Un grupo de 12 migrantes nicaragüenses se realizó cortes en los brazos frente a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) para exigir atención luego de dos meses de esperar que les sea regularizada su situación legal en nuestro país.
Los 12 migrantes de Nicaragua denunciaron que llevan varias semanas bajo el sol, la lluvia de esta región tropical y durmiendo a la intemperie a la espera de ser atendidos por el INM, para que les permitan quedarse en nuestro país o bien transitar libremente hacia la frontera norte con Estados Unidos.
Los 12 hombres se cortaron para exigir así que la delegada del INM, Paola López Rodas, y su personal operativo, las atienda de inmediato.
Y efectivamente, tras esta acción, los hombres y sus familiares fueron atendidos por los servicios médicos y llevados hacia otro punto de la ciudad, en Unión Hidalgo, donde les extendieron sus documentos migratorios.
Irineo Mujica Morga, un activista defensor de los derechos de los migrantes, dijo que “ante la crueldad del INM al renovar la cacería de migrantes en las calles, la desesperación y la incertidumbre de los migrantes que están viviendo en las calles, llevó a un grupo de ellos mutilarse los brazos y cortarse las venas, pues sería peor el infierno de regresar a países donde sus vidas corren peligro en esta migración forzada como lo es con los hombres, mujeres y niños de Nicaragua, Venezuela, Cuba, África Haití y otros países han decidido cortarse las venas”.
Explicó que los migrantes que decidieron mutilar sus venas son 12 de Nicaragua, quienes fueron atendidos y llevados a Unión Hidalgo, “donde perversamente ahora sí los van atender después de estar casi dos meses pidiendo que se les atienda. Hasta este grado hemos llegado para que el INM haga su trabajo y deje de burlarse de la comunidad migrante”.
Pidió al INM ser sensibles y responsables con los migrantes que no sólo están desesperados, también corren un gran peligro de ser deportados a sus países de origen, de donde han salido huyendo de la violencia, la inseguridad y las amenazas en contra de ellos.
Mujica Morga demandó al INM frenar “las redadas, la cacería de migrante y resolver la situación con responsabilidad y rapidez para evitar más daño a la población migrante”.