Redacción
México.- En su primera conferencia de prensa matutina como presidenta de México, Claudia Sheinbaum conmemoró los trágicos acontecimientos del 2 de octubre de 1968 con una disculpa pública del gobierno federal por la masacre estudiantil en Tlatelolco. A través de un acuerdo histórico, el gobierno reconoció oficialmente los hechos como crímenes de lesa humanidad y expresó su compromiso de garantizar que nunca más se utilicen las fuerzas armadas para reprimir a la población.
Ernestina Godoy, consejera jurídica de la Presidencia de la República, fue la encargada de leer el acuerdo, en el que se citó al entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz, quien en su quinto informe de gobierno asumió la responsabilidad de los hechos. En este decreto, que será publicado en el Diario Oficial de la Federación, se instruye a la Secretaría de Gobernación (Segob) a ofrecer una disculpa pública a las víctimas y sus familias, y a fortalecer la formación en derechos humanos dentro de las fuerzas armadas.
🔴#ÚLTIMAHORA I El Estado mexicano pide una disculpa pública a las víctimas de la matanza de Tlatelolco en 1968.
“Hechos como este no pueden volver a repetirse”: Rosa Icela Rodríguez, secretaria de @SEGOB_mx. pic.twitter.com/9s4t8C4ulL
— Ruido en la Red (@RuidoEnLaRed) October 2, 2024
Cumpliendo con las instrucciones de Sheinbaum, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, ofreció la disculpa pública en nombre del Estado mexicano. Rodríguez subrayó la importancia de reconocer la responsabilidad histórica y resaltó el papel de las familias y sobrevivientes en mantener viva la memoria de los crímenes. “La lucha por la justicia continúa gracias a ellos”, afirmó.
🔴 Claudia Sheinbaum dedica su primera mañanera al movimiento del 68: La presidenta inauguró #LaMañaneraDelPueblo recordando a los estudiantes que lucharon por la libertad y democracia el 2 de octubre de 1968. ¡El 2 de octubre no se olvida! #2DeOctubre #ClaudiaPresidenta… pic.twitter.com/wtOkQ4PCW4
— Punto 4T (@Punto4T) October 2, 2024
Rodríguez también destacó que la administración actual, como parte de su proyecto de Transformación, tiene la obligación moral de garantizar que estos crímenes del pasado sean reconocidos y se haga justicia, asegurando que hechos como los de Tlatelolco no se repitan. Este acto de disculpa y reconocimiento representa un paso hacia la reconciliación y el respeto a los derechos humanos en México, 56 años después de uno de los episodios más oscuros en la historia del país.
Discussion about this post