Redacción
Suiza.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una advertencia a los gobiernos de todo el mundo, instándolos a no bajar la guardia frente a la pandemia de COVID-19, ya que un número significativamente bajo de países está reportando muertes y hospitalizaciones relacionadas con la enfermedad. Según la OMS, solo el 25% de los países comunicó muertes por COVID-19 el mes pasado, y tan solo el 11% informó de hospitalizaciones por la enfermedad.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó que aunque la inmunización de la población y las infecciones han contribuido a reducir el riesgo de muertes y casos graves en comparación con el año pasado, el riesgo de COVID-19 en la salud pública sigue siendo alto. Tedros advirtió sobre la posibilidad de que surja una variante peligrosa que pueda causar un repunte repentino en los contagios y las muertes.
A pesar de haber declarado el fin de la emergencia internacional por COVID-19 en mayo, Tedros reiteró que el virus sigue circulando y representando una amenaza. La OMS sigue monitoreando la situación y un comité de expertos se reúne periódicamente para evaluar la respuesta al virus.
Siguiendo las recomendaciones de este comité, Tedros hizo un llamado a los países miembros de la OMS para que continúen implementando medidas de prevención, como la vacunación de grupos de riesgo y la comunicación de casos de enfermedad. Subrayó que tanto la OMS como los gobiernos deben mantener la atención en la enfermedad para evitar cualquier posible resurgimiento.
Desde el inicio de la pandemia, se han registrado más de 768 millones de casos de COVID-19 en todo el mundo, con aproximadamente 6.9 millones de muertes. Aunque las cifras de casos han disminuido significativamente en comparación con los picos anteriores de la pandemia, la OMS enfatiza que la amenaza del virus aún persiste y que los esfuerzos de prevención deben continuar.
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